Oct 28, 2024
Viabilidad de la exportación del gas argentino
Hay un numero de condiciones que deben concretarse para que resulte factible la exportación de hidrocarburos y en particular la de Gas. Primera condición: la temporalidad. Segunda condición: producción y abastecimiento doméstico. Tercera condición: los mercados externos, distinguiendo objetivos en mercados cercanos (vecindad) de los lejanos. Cuarta condición: Precios Competitivos.
Alberto Cisneros Lavaller CEO/President Global Business Consultants
Con respecto a la temporalidad, debemos desarrollar visualizaciones sobre cómo y cuáles serán las oportunidades de Argentina en el mediano plazo, por ejemplo. En este sentido, pensar que el Mediterráneo y Europa presentarían oportunidades de mercado para el GNL como consecuencia de la Guerra Rusia-Ucrania puede resultar atemporal. Para el 2030 es muy posible esa Guerra haya Finalizado. En otras palabras, debemos “imaginarnos” a través de escenarios diversos como los que desarrollan nuestras investigaciones, que oportunidades y retos se presentan para la exportación de gas proveniente de nuestro país para esa fecha.
Con relación a la producción y abastecimiento debemos revisar diferentes Escenarios de organismos oficiales y privados analizando diversas variables. La primera es el crecimiento de la producción de gas. Para el 2030 se espera que el Gas llegue a los 176 Mm3/d. Ahora bien, esas perspectivas pueden concretarse siempre y cuando exista un régimen de incentivos presente hasta el 2030. Tener en cuenta que para entonces habrá ya un nuevo proceso electoral en la Argentina. Y que esa seguridad jurídica se mantenga para asegurar la llegada de las inversiones extranjeras a VM. Además, que impere el debido proceso de ley y orden en nuestro país. Provisto que todas esas condiciones se den, cabe investigar el crecimiento de la demanda doméstica y el logro del autoabastecimiento, a fin de poder exportar el excedente (tal como nuestros estudios lo consideran).
Con respecto a los mercados-objetivo en el extranjero hay que diferenciar los cercanos, de los lejanos.
Dentro de los mercados-objetivo cercanos, el Cono Sur presenta alternativas claras a través de la estructuración de un Anillo Geopolítico de Gas con los vecinos. A modo de ejemplo, cabe citar exportaciones de gas realizadas a través de gasoductos conexos (distancias cercanas por lo cual se identifican como dentro de una Geopolítica de “Entrampamiento”) para abastecer Brasil (Sao Paulo) y Chile. Brasil puede requerir para el 2030, alrededor de 43 Mm3/d suplidos a través del Gasoducto Norte en conexión con el GasBol de Bolivia. Y Chile para esa misma fecha pudiera necesitar alrededor de 7-8 Mm3/d suministrados a través del plexo de gasoductos por el norte, y centro-sur del país.
Ahora bien, la situación de mercados-objetivo en el extranjero lejano concita otros desafíos. En primer lugar, disponer de facilidades flotantes o en tierra firme de Plantas de Licuefacción para poder exportar el gas licuado en barcos metaneros (la Geopolítica de Libre Flujo, permite llegar a destinos lejanos, vía marítima). Los esfuerzos de Pan American Energy con su proyecto Golar (exportar cerca de 12 Mm3/d a través de Chubut) y el de Petronas/YPF desde Punta Colorada en Rio Negro (30 Mm3/d) son ejemplos al respecto. Quizás pueda sumarse los esfuerzos de Fénix (Total y otros) en mar afuera del Sur Argentino. Hay que tener en cuenta que la construcción e infraestructura de estas plantas demora varios años. Y además, hay que divisar alternativas de mercado en el exterior no-próximo. Por ejemplo, en la Costa Atlántica margen occidental; hay algunas islas con declino marcado en su producción de gas, como otros países caribeños. En la margen oriental del Atlántico merece analizarse países Africanos que pudieran demandar el Gas Argentino allá para el 2030. Y no debemos eludir la Europa Mediterránea, ni tampoco el Lejano Oriente donde dos grandes consumidores como China e India pudieran requerir la importación de nuestro GNL para entonces. Ahora bien, algo que no podemos omitir, tal como lo verifican nuestros análisis, es el estudio de la demanda y suministro locales dentro de esos mercados. Y si bien ello es condición necesaria, no es condición suficiente si no incluimos un análisis de competidores (que pudieran adelantársenos en el tiempo) para abastecer esos mercados-objetivo.
Al considerar a los competidores, surge otra condición ineludible: COMPETITIVIDAD de PRECIOS. Los precios del GNL de Argentina deben estar alineados con los del GNL internacionales. O diríamos que ligeramente por debajo; la situación de “aislamiento geoeconómico” en que la que nos encontramos hace que los cargamentos deban recorrer trayectos mayores. Por lo tanto, tendrán fletes con altos costos para llegar a su destino final. En otras palabras, no será posible tener precios del gas doméstico a boca de pozo determinados política o consensuadamente. La producción deberá estar regida por una máxima eficiencia y mayor productividad, a fin de que a esos precios a nivel nacional se les pueda incluir el transporte local (gasoducto), el de licuefacción, el del flete internacional y sean aún competitivos con los precios de los marcadores internacionales. Sean estos de Japón/Corea, Holanda o Inglaterra, para citar tan solo algunos ejemplos.
Así y solo así, con el detallado análisis de estas complejidades, es que tendrá la Argentina del 30 asegurado su futuro de exportación Gasífera.
En otra oportunidad, pudiéramos ofrecer detalles similares para la exportación de crudos y productos petroleros de nuestra Argentina futura.