Ene 16, 2023

In Memoriam

Octavo aniversario de la muerte

de Alberto Quirós Corradi

Por Gustavo Coronel


 

Querido e inolvidable Alberto:

Visita de Alberto, Washington DC, con nuestras esposas

Hoy se cumplen ocho años de tu muerte, después de haber dado una gran batalla contra duras aflicciones. Estuviste alerta y lúcido hasta el último momento, pensando en los grandes asuntos del petróleo a los cuales te habías dedicado por toda una vida. Después de tu salida de la industria petrolera, al ver que ya la politización de PDVSA te cerraba el camino de la presidencia para la cual tenías sobradas credenciales, te dedicaste a formar alumnos, enseñándoles tu estilo de resolución de problemas, el cual tenía como componente central tu visión de helicóptero, esa cualidad de poder ver un asunto desde la altura, con todas sus ramificaciones y complejidades, a fin de lograr soluciones integrales.

SI vivieras aún, querido Alberto, tronarías contra los niveles de degradación a los cuales ha llegado la industria petrolera venezolana, en manos de ladrones, narcotraficantes, ineptos e ignorantes, toda una larga fila de payasos asesinos. A cargo del ministerio del sector se encuentra un sancionado por narcotraficante, el jefe del gobierno tiene su cabeza puesta a precio ( $15 millones) por los Estados Unidos y se acaba de nombrar una nueva junta directiva  para PDVSA integrada por jugadores de ligas menores,  incluyendo jóvenes encargadas de finanzas y comercialización internacional sin experiencia alguna en la industria, graduadas en universidades o escuela técnicas de tercera categoría y con mayor conocimiento de Facebook que de asuntos gerenciales. .

Claro, ya no hay una empresa que rescatar puesto que PDVSA es un cadáver. Ahora, parte de lo que resta de su operación aguas arriba está siendo dirigida por una empresa petrolera estadounidense, CHEVRON, a la cual el régimen debe miles de millones de dólares, lo cual lo ha obligado a entregarle la gerencia operacional para que pueda generar el dinero necesario para saldar su deuda. Los acreedores, contratistas falsos y comercializadores simiricuires se multiplican, cada quien empeñado en arrancarle trozos al cadáver de la empresa.

Querido Alberto: Es mejor que te hayas perdido esta parte de la película porque es deprimente observar no solo la ruina material de la industria sino el total colapso moral de la gente que la rodea. Lamento que los gerentes petroleros que, como tú, dieron lustre a la industria venezolana hayan sido olvidados: Guillermo Rodríguez Eraso, Jack Tarbes, Samuel Wilhem, Ramón Cornieles, Ernesto Sugar, Renato Urdaneta, Brigido Natera, el mismo General Alfonzo Ravard y los muchos otros que se fueron.

Tendrán ustedes, gente admirable, que esperar el regreso de la libertad, la democracia y la dignidad – si es que algún día llegan – para que sus nombres le sean dados a instalaciones petroleras, escuelas, universidades, plazas y avenidas, en modesto pago de la inmensa contribución que hicieron a Venezuela y la cual esta marabunta chavista se ha encargado de destruir en lo que va de siglo.

Tu amigo,

Gustavo

Publicado por Gustavo Coronel