Blog 480 

Y QUE… CINCO MILLONES DE PENSIONADOS


La fórmula de destrucción de la “revolución” venezolana ha sido muy superior a la cubana. Por lo menos mucho más sutil.

Mientras Cuba para acabar con su agricultura y ganadería (porque la acabó) insultó a los “latifundistas”, expropió tierras y acabó con la propiedad privada en medio de una dictadura feroz con paredón y todo; la “revolución” venezolana se conformó con invadir, tomar las tierras, hacer cursis métodos chaz. Cero decretos de expropiación y no tuvo que acabar con la propiedad privada para acabar con el agro.

Mientras Cuba para borrar la libertad de expresión expropió los medios y se declaró marxista leninista, el socialismo del siglo XXI hizo odas a la libertad de expresión y paralelamente  dejaba sin papel a los  periódicos libres y entregaba toneladas a los” leales”, “democratizaba”  las emisoras de radio, le ganaba demandas a los periódicos  “calumniadores” con “sus” tribunales, distribuía  entre los medios “panas” la propaganda gubernamental, tomaba a Rctv y justificaba diciendo que se le acabó la concesión;  o desaparecía ante el silencio del gobierno los equipos de la televisora de la Asamblea Nacional cuando ganó la oposición. Así mientras Cuba se veía obligada a hablar mal de la democracia “burguesa” e inventar odas para disfrazar la represión socialista de democracia popular, los bolivarianos se jactaban de promover con esas medidas la libertad de expresión.

Mientras el régimen cubano acabó de un plumazo con la autonomía de las universidades, el gobierno venezolano pregonando ser paladín de la democracia universitaria, les niega los presupuestos, lleva hasta la mendicidad los sueldos de los profesores y ahoga la educación superior libre.

 Mientras el comunismo cubano acabó de sopetón con las elecciones, la “revolución” anula a centenares de líderes mediante cárcel, exilio o inhabilitación, ídem con los partidos; nombra “su” CNE…  y como si nada, le grita al mundo que son demócratas.

Cuba de sopetón dijo no creo en las libertades ni en la propiedad privada y Fidel es para toda la vida y punto. En cambio, la autocracia venezolana acabó con la propiedad y las empresas y haciendas, mientras hacía loas a la propiedad privada, a la productividad y a la agricultura. Facilito.

TODOS LOS CAMINOS CONDUCEN A ROMA

Fidel Castro, el Lex Luthor latinoamericano, aprendió mucho del proceso de Allende en Chile. Se dio cuenta que eso de expropiar y tapar las bocas y hasta los cerebros a todo gañote, no daba resultado por “la vía electoral”. Entonces inventó la fórmula para implantar el comunismo destruyendo la democracia, mientras aparentaba ser demócrata. Por dentro, como los virus.

Logro Fidel que todos los caminos condujeran … al comunismo. Que todas las rutas sirvieran para el desiderátum de sus modalidades de gobierno: destruir para gobernar por siempre. En Venezuela, la rana hervida: un pueblo feliz y adormecido por el populismo mientras lo sancochan. No chico yo no creo… no chico esto no es comunismo.

LAS PENSIONES

Raúl Castro dijo que en Cuba no hay pensionados. Más inteligente, el gobierno venezolano se jacta de tener cinco millones de pensionados mientras los acaba y para remate,lo vende como un logro del socialismo. ¿Cuáles pensiones? Con menos de doscientos millones de dólares se jactan de cubrir a todos los viejitos. Y la verdad es que para hacerlo requerirían por lo menos doce mil millones de dólares, al muy módico monto de doscientos dólares al mes por cabeza. Saque cuentas.

Dos dólares de pensión no es pensión, es miseria, es burla. Pero como todos los caminos conducen a los no pensionados, como en Cuba, otra vez llegaron a la meta cubana, cero pensionados (porque miseria no es pensión). Se jactan y peor, algunos “pensionados” hasta les creen.  

Cuando la gente huía del espanto cubano y prefería ser carne de tiburón antes de pasar hambre y represión en la isla, Fidel les decía Váyanse gusanos, y los insultaba. A la diáspora que también huye de Venezuela por motivos similares, el gobierno siguiendo el nuevo libreto, les dice “con cariño”: confundidos, y les invita a “volver a la patria” a disfrutar del socialismo venezolano, de los sueldos peores que las pensiones, de los hospitales enfermos y de la educación que no educa… a pasar hambre. Los invita a venir a disimular que trabajan para que el gobierno disimule que les paga. La propia comedia de las equivocaciones.  Ni a Shakespeare se le hubiera ocurrido. 

MEA CULPA

Ante lo evidente del hambre y la desesperanza, el gobierno reconoce que todo está desastroso y casi que lloran con el pueblo (se solicita cocodrilo). Pero claro, la culpa es de la inflación inducida, del bloqueo criminal, o de las sanciones del imperio. Como si los ciudadanos no estuviéramos claros en que la destrucción de Pdvsa que nos dejó sin divisas y sin gasolina; las invasiones a las haciendas y la “empresa cerrada empresa tomada” que nos dejaron sin empleo, y el gigantesco dinero inorgánico que disparó la hiperinflación, son la causa de este desastre y que los   únicos responsables son los gobernantes de los últimos veinte años, exitosos en su política de lobo feroz: destruirte para comerte mejor. Porque han sido eficientes destruyendo a Venezuela.

Ya nadie les cree. ¿Para qué quieren seguir en el poder? ¿Cómo navegarán en ese 80 % de gente que no puede comer completo, o los crecientes niños desnutridos? No hay máscara semejante a ese rostro.  

Viven en Cair Paravel (capital de Narnia), mientras el pueblo vive – vivimos – en Pandemónium (la capital del infierno).

Y los líderes de la oposición, ¿qué están esperando para capitalizar el hambre, el descontento, la desesperanza y la impopularidad del gobierno? ¿Van a seguir ponchándose ante este pitcheo facilón?

Se solicitan políticos que sepan batear bombita.    

Esta columna se publica en los medios digitales El Diario de Caracas e Informe 21, así como en la revista Petroleum.

……………………………

CURRICULUM VITAE / RAFAEL GALLEGOS CASTRO

Ingeniero de petróleo, Consultor Gerencial Independiente, Facilitador de talleres a empresas y columnista semanal en la prensa nacional. Ha dictado alrededor de 400 talleres de Gerencia y de Petróleo. Consultor Gerencial.

Profesor invitado en el Programa Internacional de Gerencia de Hidrocarburos en el IESA. Profesor invitado en programa de CENDECO Entorno Social, en la Universidad Metropolitana. Coordinador De Diplomado “Diplomacias, Petróleo y otras formas de Energía”, en la UCV. Coordinador Del Diplomado “Venezuela Energética” en la UCAB. Charlista de “El entorno como componente estratégico del negocio” ante ejecutivos de PEMEX en Villahermosa, México.

Trabajó 23 años en PDVSA donde se desempeño como operador en los campos petroleros e ingeniero de yacimientos y de planificación en las áreas de Oriente, Zulia y Barinas y Apure. Fungió Jefe de Planificación de Operaciones en Corpoven Barinas, Consultor Gerencial de Mejoramiento Continuo de Corpoven, Líder de Inversión Social de PDVSA EyP, Gerente de Asuntos Públicos de PDVSA SUR, Gerente General de AC Voluntariado de PDVSA y líder de proyecto de microempresarios del CIED ( COFIE oriente).

Coautor (en conjunto con Eddie Ramírez) del libro: “Petróleo y gas, el caso Venezuela”, año 2015. Ha sido coautor de libros/compilación de diversos autores acerca de Gerencia y Responsabilidad Social. Columnista semanal del Diario 2001 desde el año 2005 hasta el 2011. Actualmente publica artículos semanales en su Blog “Petróleo sin Reservas”, que son reproducidos en los periódicos digitales de Estados Unidos: Informe21, Diario de Caracas y El Punto News.

Se graduó de Ingeniero de Petróleo en la UCV en 1979 y realizó estudios parciales de postgrado en Finanzas en la misma universidad en los años 1983 y 1984.

Es miembro del Colegio de Ingenieros de Venezuela (CIV), de la Sociedad Venezolana de Ingenieros de Petróleo (SVIP), del sindicato de trabajadores petroleros Unapetrol, miembro Fundador del Centro de Orientación de Energia (COENER), y miembro del Equipo Coordinador de Gente del Petróleo.