Jul 06, 2023

Bolivia pierde terreno como exportador de gas

La construcción de un nuevo gasoducto en Argentina preocupa al país andino, que está perdiendo uno de sus principales mercados de exportación, mientras lucha contra su primera crisis económica en décadas.

Por Fernando Molina/El País

Bolivia está a punto de perder el mercado que paga los mejores precios por su gas: Argentina. El 9 de Julio Buenos Aires inauguró la primera fase del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner. Es un golpe para Bolivia, ya que cerrará el mercado de gas en su vecino del sur. Bolivia obtiene $600 millones de sus importaciones de gas a Argentina, y perder estos ingresos afectará al país, que está experimentando su primera crisis económica en dos décadas.

El nuevo gasoducto argentino está proyectado para manejar hasta 21 millones de metros cúbicos de gas por día de los campos de Vaca Muerta, en el sur de Argentina, y transportarlo a la zona central del país. Argentina también ha iniciado las obras de su Gasoducto del Norte, que hoy distribuye gas boliviano en el norte del país, para que opere en ambos sentidos.

Flavia Royón

El comercio entre Bolivia y Argentina llegará a su fin en el 2024, cuando los países reviertan las posiciones que han mantenido durante 20 años. En ese entonces, Bolivia estaba experimentando un auge del gas mientras Argentina luchaba con una crisis energética.Gracias a los dos gasoductos, Argentina prevé ahorrar unos $2.000 millones en el 2023 y más de $4.000 millones a partir del 2024.

Flavia Royón, Secretaria de Energía de Argentina, dijo el 15 de Mayo, cuando el gobierno celebró la finalización del primer tramo del oleoducto, “El gas de Vaca Muerta es seis veces más barato que el que se importa”. Argentina podría convertirse en un exportador líder de gas natural en la región, una posición que ahora se le está escapando a Bolivia.

Álvaro Ríos

Álvaro Ríos, consultor energético boliviano, dijo en referencia al declive de la industria gasífera boliviana por la falta de inversión y la consecuente falta de nuevos descubrimientos de yacimientos de gas, “Argentina no nos ha dado un golpe. El golpe nos lo dimos nosotros mismos. En el 2014 exportamos 48 millones de metros cúbicos de gas por día: hoy solo podemos exportar 22 millones. Deberíamos estar vendiendo 23 millones de metros cúbicos a Argentina, pero solo le estamos dando de cuatro a ocho millones de metros cúbicos por día. Por eso el contrato ya no durará hasta el 2027, como estaba previsto, sino que terminará el próximo año”.

Luis Arce

Luis Arce, Presidente de Bolivia, busca expandir la exploración de nuevos yacimientos y destinó este año $326 millones para el proyecto. Espera que esta inversión compense el mal desempeño que ha tenido Bolivia en los últimos años. Un informe oficial indica que, entre 2005 y 2020, se perforaron 192 pozos y que la producción existente apenas aumentó un 2%. Hace dos meses, Arce inauguró el pozo Yope-X1, pero aún no se confirma su potencial comercial. Ríos se muestra escéptico ante la posibilidad de que nuevos descubrimientos cambien la situación. “Un ciclo exploratorio dura 10 años, entonces no creo que haya cambios; lo que va a pasar con Argentina no se puede revertir”, dijo. Ríos calcula que para 2029 Bolivia incluso dejará de exportar gas a Brasil, el único mercado que le quedará cuando finalice el comercio con Argentina el próximo año.

Esto se debe a la falta de reservas. La escasez es tan severa que Bolivia podría incluso convertirse en importador de gas argentino. “Es bueno que tengamos un país vecino con gas, eso nos va a servir en el futuro”, dijo Ríos. El experto piensa que el futuro papel de Bolivia en el juego energético regional será alquilar sus gasoductos, que están conectados a São Paulo, para que por ellos se bombee gas de Vaca Muerta a la metrópoli brasileña. Otros analistas bolivianos son algo más optimistas, pero en general se piensa que Bolivia debería apostar por industrias distintas al gas.

La situación preocupa al sur de Bolivia, que es el país que más gas produce. Óscar Montes, gobernador de la región boliviana de Tarija, fronteriza con Argentina y principal centro de producción de gas, ha pedido que se consideren otras alternativas, argumentando que la decadente industria regional del gas, que sufre la crisis de producción desde 2015, necesita mudarse a nuevas áreas.

El actual gobierno boliviano dice que las administraciones anteriores cometieron un gran error al no invertir más en la exploración de gas y al no implementar el programa de incentivos para las empresas petroleras extranjeras que había sido diseñado para anticipar la escasez futura. El oficialismo criticó duramente a un exministro que le dijo públicamente al entonces presidente Evo Morales que no había nada de qué preocuparse ya que Bolivia flotaba en “un mar de gas”.