Oct 21, 2024
Empleos en riesgo
La continua pausa del Departamento de Energía en la concesión de permisos para instalaciones de exportación de GNL en Estados Unidos pone en peligro 900.000 empleos estadounidenses.
Mallory Smith/
Un nuevo informe publicado hoy por el National Association of Manufacturers (NAM), elaborado por PricewaterhouseCoopers, destaca los beneficios económicos de las exportaciones estadounidenses de GNL y concluye:
“Se estima que las exportaciones estadounidenses de GNL generaron un total de 222.450 puestos de trabajo en el 2023. Estos puestos de trabajo generaron 23.200 millones de dólares en ingresos laborales, añadieron 43.800 millones de dólares al PIB y aportaron más de 11.000 millones de dólares en ingresos por impuestos y regalías a los gobiernos federal, estatal y local en 2023”.
Jay Timmons, Presidente y CEO de NAM dijo a FOX Business: “Con una estrategia energética que abarque todo lo anterior, no tenemos que elegir entre la seguridad nacional, el crecimiento económico y la protección del medio ambiente: van de la mano. La investigación de hoy destaca el enorme potencial que liberamos cuando adoptamos la producción energética estadounidense”.
Las políticas de la administración Biden amenazan los empleos, la economía y las comunidades de EE. UU.

Jay Timmons
Las contribuciones económicas de la industria del GNL son innegables, pero la postura de la administración Biden sobre restricting LNG exports approvals el comercio con países que no tienen acuerdos de libre comercio amenaza con deshacer estos avances. El análisis de NAM muestra cuánto está en juego si persisten estas políticas.
En virtud de la continua pausa en las exportaciones del Departamento de Energía, 900,000 jobs could vanish, La medida eliminaría 103.900 millones de dólares de ingresos laborales. No es solo un golpe para los trabajadores, sino que amenaza el sustento de familias estadounidenses y comunidades enteras en todo el país.
No solo están en riesgo los empleos estadounidenses, sino que la economía estadounidense en general está amenazada por el . NAM estima que una pausa en la exportación de GNL sofocaría más de 215.000 millones de dólares en contribuciones al PIB de EE. UU. Esto es una amenaza para la estabilidad económica en Estados Unidos y socava el progreso histórico logrado en la industria por los fabricantes estadounidenses.
A nivel local, las comunidades que dependen de los ingresos por impuestos y regalías de las exportaciones de GNL también están en peligro. Como detalla el estudio: “Incluyendo los efectos directos, indirectos e inducidos, se proyecta que el apoyo fiscal total del sector de exportación de GNL de EE. UU. al gobierno federal, los gobiernos estatales y locales en 2044 será de 46.000 millones de dólares”.
Consecuencias más allá de nuestras fronteras
El impacto de limitar las exportaciones de GNL no es solo nacional. Restringir las exportaciones de GNL no solo perjudica a los trabajadores y las comunidades estadounidenses, sino que obliga a los aliados de Estados Unidos a recurrir a fuentes de energía más riesgosas y menos fiables.
Según la EIA, en 2023, Estados Unidos consolidó su posición como el mayor exportador de GNL del mundo, con exportaciones de un promedio de 11.900 millones de pies cúbicos por día, un aumento del 12% en comparación con 2022. Estados Unidos se ha convertido en un proveedor fundamental de gas natural de combustión más limpia para las naciones que buscan reducir su dependencia de alternativas más sucias de países como Rusia.
Jay Timmons dejó en claro lo que está en juego: “Nuestra nueva investigación deja claro que restringir las exportaciones de GNL pone en peligro los empleos y el crecimiento económico. También obliga a otras naciones a depender de alternativas más sucias de naciones adversarias como Rusia, lo que exacerba los riesgos de seguridad nacional. Al ampliar las instalaciones de exportación de GNL, aumentar la producción de gas natural y apoyar las iniciativas de energía limpia, podemos impulsar la fabricación, mejorar la calidad de vida, impulsar nuestra seguridad y reducir las emisiones en todo el mundo”.
Liberar el potencial energético de Estados Unidos
El mensaje del estudio de NAM es clarísimo: las exportaciones de GNL tienen un enorme potencial para la economía estadounidense, la seguridad energética y el medio ambiente. Pero para aprovechar este potencial se necesitan las políticas adecuadas, que apoyen la producción energética nacional y garanticen que el GNL estadounidense pueda competir en el escenario mundial.
Los responsables de las políticas tienen la oportunidad de aprovechar estos beneficios, lo que permitirá que la industria del GNL impulse los objetivos energéticos de Estados Unidos, incluida la transición a fuentes de energía más limpias. La administración Biden debe reconsiderar su enfoque actual y levantar las restricciones que frenan la energía estadounidense.
Como destaca Timmons: “Este estudio ofrece a los responsables de las políticas, presentes y futuros, un camino claro para crear puestos de trabajo y cientos de miles de millones de dólares en crecimiento económico aprovechando el abundante suministro de GNL de Estados Unidos”.