ExxonMobil propone una solución al cambio climático

Los inversionistas y accionistas de las principales compañías petroleras del mundo han incrementado la presión para comenzar a abordar los riesgos del cambio climático y establecer objetivos de reducción de emisiones para coadyuvar a alcanzar los objetivos del Acuerdo de París

 (Versión libre del original escrito por Tsvetana Paraskova para Oilprice.com)

 

 

Algunas empresas petroleras europeas han comenzado lentamente a sucumbir a las demandas de los inversionistas y recientemente se han comprometido a establecer objetivos para controlar y restringir las emisiones de CO2; al tiempo que las grandes empresas petroleras europeas también han aumentado las inversiones en energía limpia y tecnología, desde las redes de carga de vehículos eléctricos (EV) hasta la generación de energía eólica y los servicios públicos.

ExxonMobil, el gigante petrolero con sede en Texas, cree que la respuesta a los riesgos del cambio climático es invertir en investigación y desarrollo (I&D) para encontrar soluciones integrales y escalables aún por descubrir, que mitiguen el calentamiento global, en lugar de poner dinero en molinos eólicos y granjas solares; para lo cual recientemente anunció que invertirá US $ 100 millones durante diez años para investigar y desarrollar tecnologías avanzadas para bajar las emisiones, en el Laboratorio Nacional de Energía Renovable y el Laboratorio Nacional de Tecnología Energética del Departamento de Energía de Estados Unidos. La inversión apoyará la investigación y la colaboración en las formas de llevar los biocombustibles y la captura y almacenamiento de carbono a escala comercial en los sectores de transporte, generación de energía e industrial.

El compromiso financiero de Exxon para desarrollar tecnologías de bajas emisiones (US $ 100 millones en 10 años) es solo una pequeña fracción de los US $ 2.4 mil millones en ganancias que la empresa reportó en el primer trimestre del 2019. El anuncio de la inversión en I + D con menos emisiones se produce antes de la reunión anual de accionistas de la empresa el 29 de Mayo, en la que algunos inversores institucionales continuarán presionando a Exxon para que comience a dar cuenta del riesgo climático en sus operaciones.

[perfectpullquote align=”left” bordertop=”false” cite=”” link=”” color=”” class=”” size=””]“A diferencia de las principales compañías europeas de petróleo y gas, ExxonMobil no considera que las soluciones existentes de bajas emisiones sean lo suficientemente completas”[/perfectpullquote]

A diferencia de las principales compañías europeas de petróleo y gas, ExxonMobil no considera que las soluciones existentes de bajas emisiones sean lo suficientemente completas, por lo que trabajando en una solución que no existe pero que se necesita, pues la empresa esta convencida que hay más valor en eso que invertir en tecnologías que ya existen pero que no son lo suficientemente integrales. El enfoque de Exxon para abordar los riesgos climáticos difiere de lo que están haciendo sus competidores europeos.

Para estar seguros, ninguna de las mayores dejará de bombear petróleo y gas en el futuro previsible. Shell, BP, Total y Equinor, sin embargo, han estado invirtiendo en tecnología y operaciones limpias en los últimos años.

Shell está invirtiendo en nuevas energías, incluida la compra de First Utility y NewMotion, uno de los proveedores de recarga de vehículos eléctricos (EV) más grandes de Europa.

En Diciembre del año pasado, en primer lugar en la industria, Shell dijo que planea establecer objetivos a corto plazo para reducir la huella de carbono neta de los productos energéticos que vende; sin embargo, el negocio principal dela compañía es y seguirá siendo el petróleo y el gas en el futuro previsible.

Por otra parte, BP compró en Junio del año pasado, la mayor compañía de carga de EV del Reino Unido, Chargemaster.

Equinor, que el año pasado cambió su nombre de Statoil para rebautizarse como una compañía de energía, en lugar de petróleo y gas, planea impulsar su cartera de renovables, porque también se ha rendido recientemente ante la presión de los inversionistas, diciendo que revisaría sus objetivos climáticos existentes hasta el 2030, propondrá otros nuevos para el 2030 y más allá, y vinculará la remuneración de los ejecutivos y los empleados para lograr esos objetivos.

ExxonMobil, por su lado, está invirtiendo dinero en el desarrollo de tecnologías de energía novedosas y escalables y este compromiso la destaca como la mayor inversión externa única en investigación en NREL en la historia del Laboratorio Nacional de Energía Renovable (NREL).

La negativa de la junta directiva de Exxon a abordar adecuadamente las preocupaciones importantes de los accionistas y dar cuenta adecuadamente del riesgo climático en sus operaciones, incluso cuando sus competidores lo hacen, presenta una crisis de gobernabilidad. El hecho de que Exxon no demuestre que está preparado para tomar medidas hacia la transición hacia un futuro con menos emisiones de carbono pone en riesgo su negocio.