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MÉXICO: ¿CANTINFLEO O ACUERDO?

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Parece inevitable el cantinfleo en las negociaciones. En México, la tierra del gran Cantinflas, el gobierno hará lo posible – y lo imposible – para distraer el proceso y al mejor estilo gatopardiano, hacer cambios para que todo siga igual.

Es decir, aparentar que ciertamente se logran avances, con acuerdos llenos de redundancia, que como acertadamente apreció el columnista Carlos Blanco, determinen que el sol sale por el este.

El verbo cantinflear, es un homenaje del idioma al gran cómico mexicano Cantinflas, que significa hablar o actuar de forma disparatada e incongruente, sin decir nada con sustancia.

Algo así como negociar, negociar y negociar… sin llegar a nada.

Seguramente las negociaciones de México estarán signadas por muchos cantinfleos. Tal vez sean inevitables intríngulis de la diplomacia. Lo importante es que, por encima de ellos, se llegue a acuerdos que agreguen valor a la democracia venezolana.   

¿POR QUÉ NEGOCIA EL GOBIERNO?

Sería por lo menos ingenuo creer que el gobierno asiste a México buscando un Acuerdo para resolver la dramática situación que padece Venezuela luego de veinte años de “revolución”. Que van a México a iniciar una apertura democrática, incrementar los salarios de hambre, restituir la producción petrolera, agropecuaria e industrial, mejorar los servicios de electricidad, agua, sanitarios y educativos… a resucitar el país que ellos mismos destruyeron.

No, el gobierno asiste a México con un único objetivo: que le levanten las sanciones… sin que le minimicen el poder.

¿Y por qué asiste?, porque está muy debilitado, no tiene recursos para mantener la burocracia y sabe del creciente rechazo de la población. El gobierno va a México a la búsqueda del oxígeno perdido.

Además, tratando de lograr algún reconocimiento internacional para atraer algunas inversiones, o lograr que le devuelvan Citgo, Monómeros, los depósitos en Inglaterra, en el FMI, y les abran posibilidades de interacción bancaria internacional.

¿POR QUÉ NEGOCIA LA OPOSICIÓN?

Obviamente la oposición está debilitada. El mantra triangular del G4 de “cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres” es cada vez menos aplicable.

El apoyo de la población a los líderes opositores ha disminuido considerablemente, aunque hay que aclarar que la ciudadanía se mantiene alerta para seguir alguna ruta viable hacia la implantación de la democracia.

Por otra parte, la división de la oposición es terrible.  Un archipiélago.

A la vista de este crítico escenario y luego de analizar resultados de políticas anteriores, la oposición negociadora pareciera haber cambiado la estrategia. Ahora la materializa unidad en un pentágono integrado por : atención a crisis humanitaria, presión interna, presión externa y elecciones libres. Una nueva ruta para la búsqueda un Acuerdo Nacional, que saque a Venezuela del peor atolladero de su historia.

EL TRUEQUE

Estados Unidos, la Unión Europea, y los países que en número de cincuenta no reconocen a Maduro, saben que su gobierno está muy debilitado y que por eso accede a negociar. Y la estrategia de estos países es clara: Cambio Sanciones por Democracia.

Es decir, un trueque. Veamos, sólo como ejemplo, en que podría consistir:  

Si el gobierno libera los presos políticos… se le venden repuestos para las refinerías.

Si el gobierno habilita a políticos, a partidos, y crea condiciones vinculantes para las elecciones… se permite acceso a algunos bancos.

Si el gobierno reconoce la necesidad de repetir las elecciones parlamentarias y la presidenciales… ¡bingo!, se le devuelve Citgo, Monómeros, se abren créditos y se procura invertir….

Lo que pasa es que el gobierno sabe que, si se vuelve muy demócrata, además de contradecir lo que ha sido… tendrá que irse.

ENTRE CANTINFLEOS TE VEAS

La estrategia del gobierno en México es irse por las ramas. Darle la vuelta al problema central sin tocarlo, aparentando que se da en el blanco. Cantinflear en varias modalidades:  

–      Cantinfleos Obvios…  Acuerdo para defender el Esequibo, como el que ya vimos. Podrían continuar con algún acuerdo para protestar por los derechos de las damas de Afganistán, o por el derecho de los venezolanos para surtir gasolina sin colas, o condenando las sanciones del imperio que provocan los cortes de luz, o por la aceleración de la vacunación en Venezuela…

–      Cantinfleos Descarados…  Ya pidieron incorporar al diplomático venezolano Alex Saab como negociador, tal vez luego propongan al también diplomático Carvajal, o a algunos de sus presos de Pdvsa, o algún glorioso ex guerrillero de la FARC, o algún amigo de la “revolución” que esté pagando cárcel en el norte por drogas… Toda una Corte de los Milagros, que sería la envidia de gran Víctor Hugo.

–      Cantinfleos Subuso… Acuerdo para defender al gobierno de Nicaragua de la agresividad de los candidatos opositores, o acuerdo de solidaridad con el gobierno democrático de Cuba ante los ataques de las peligrosas hordas en las calles de La Habana, inducidas por el imperio.

La oposición ante esta estrategia gubernamental, podría proponer Contracantinfleos…  incorporar al “caballero” Koki como flamante delegado de la oposición, o acordar que la Contraloría investigue las cuentas bancarias del negociador Saab, o de Carvajal, entre otros correctos ciudadanos desprestigiados por el imperio criminal.   

¿PREACUERDOS?

Y no dudamos que Estados Unidos, Europa y los países observadores también han trazado su estrategia.

Saben que el gobierno y la oposición han llegado a un punto en que les es vital negociar. Saben que Venezuela no aguanta más.

Hasta es probable que ya haya acuerdos previos y no publicitados: Cambiar algunas sanciones por condiciones electorales, presos, libertades… reimplantar la Embajada de USA en Venezuela a cambio de elecciones presidenciales y parlamentarias limpias en determinados plazos…

Tampoco se puede descartar que, entre Rusia, Estados Unidos y China, se haya gestado un probable intercambio de patios de influencia Afganistán – América Latina.

Nunca se sabe…es lo que llaman alta política.

EL REVOCATORIO

Los negociadores de la oposición encabezados por Gerardo Blyde, seguramente manejan una estrategia clara. Se trata de gente seria que, independientemente de los resultados, están buscando un Acuerdo Nacional.

¡¡¡¡Éxito!!!!

Sin embargo, nos atrevemos a sugerir que en las negociaciones debe tener un gran peso el Referendo Revocatorio. Que debe ser un quid.

El RR está en la Constitución y corresponde gestarlo a partir del 11 de enero. Si se logra el Acuerdo de que Maduro no lo bloquee (parece mentira que “eso” haya que negociarlo) y que tenga observadores internacionales desde la primera firma, el revocatorio se daría en el primer semestre de 2022.

Y democráticamente, cambiaría todo. El RR equivale a una elección presidencial, y todo el pueblo, si es necesario por encima de los políticos, votaría masivamente ante la expectativa de triunfo.  

Ese acuerdo sería el verdadero “anticantinfleo”.

Un glamoroso triunfo ante los ojos del mundo… ¿que no lo reconozcan?, eso sería harina de otro costal.

La verdad es que Venezuela no aguanta más. Es imperativa una solución. Debemos negociar con el revocatorio en la mente.

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Venezuela merece una industria petrolera de primera, que sea capaz de contribuir a la construcción de un país de primera. ¡Hasta cuándo!

Esta columna se publica en los medios digitales El Diario de Caracas e Informe 21, así como en la revista Petroleum.

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