Aramco retrasa una importante inversión
Aramco se ha visto obligada a retrasar dos grandes proyectos de expansión en los complejos de Marjan y Berri, ya que los impactos del Covid-19 han sido de gran alcance y dañinos para la economía mundial, los precios del petróleo y la demanda
Aramco se ha enfrentado a un momento difícil en el 2020. Apenas unos meses después de su tan esperada IPO en Diciembre de 2019, los impactos de COVID-19 en la compañía son evidentes.
Conor Ward, analista de petróleo y gas de GlobalData, comenta: “Estos proyectos de expansión tenían como objetivo agregar una cantidad significativa de producción a la cartera de la empresa. Sin embargo, los impactos de COVID-19 ahora representan un impacto a largo plazo y, junto con los recortes de producción de la OPEP +, es probable que Arabia Saudita vea una producción significativamente menor de lo que se había planeado.
En compromiso con los recortes de producción acordados por la OPEP +, Arabia Saudita recortó 2,5 millones de barriles de petróleo por día (Mmbd) en Mayo, Junio y Julio. En nuevos esfuerzos para reequilibrar los precios del petróleo, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait acordaron un recorte adicional de producción de 1,18 mmbd, de los cuales Arabia Saudita perderá 1 millón. Aramco experimentará un recorte de aproximadamente el 18% en su producción originalmente planificada para 2020 y con estos recortes de la OPEP junto con los impactos de COVID-19, es poco probable que los niveles de producción se recuperen antes de 2022.
Los próximos planes de expansión se han retrasado y Aramco se volverá cada vez más estricto con su gasto de capital debido a la incertidumbre que ha traído COVID-19 al mercado. El gasto de la compañía en el primer semestre ya ha sido un 15% más bajo que en 2019 y se espera que esta tendencia continúe en 2021, ya que la compañía continúa reevaluando sus hábitos de gasto en medio de una reducción de la demanda global.
Ward concluye: “De cara al futuro, la empresa seguirá siendo la mayor empresa energética del mundo con márgenes de beneficio superiores a la media de la industria; sin embargo, la continua debilidad de los precios mundiales del petróleo ejercerá presión sobre la empresa y, a su vez, sobre el presupuesto fiscal del gobierno”.
